viernes, 16 de diciembre de 2011

En el fondo, alguien tenía que dar el paso.

Se que he hecho lo correcto. Lo que debía hacer. Lo que me merezco. He hecho lo justo y lo que cualquier día, tu o yo, terminaríamos por hacer. Ni me arrepiento, ni me alegro... y es justo eso lo que más me duele, que a pesar de todo el daño, aún queda cariño para ti. Cariño, que a mi entender, ya no te mereces. Lo siento, pero es así.


Y lo peor de todo, es que aún te echo de menos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario